Mostrando entradas con la etiqueta gastronomía de las Islas Canarias. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta gastronomía de las Islas Canarias. Mostrar todas las entradas

domingo, 15 de junio de 2014

Potas en salsa



Las potas en salsa, son un plato tradicional canario, de la tradición marinera. Como sucede con este tipo de platos, cada casa o zona las cocina a su manera, así que hoy os explico cómo la hacemos en mí familia. 

La pota es un molusco ( o cefalópodo , pues carece de concha) muy similar al calamar, pero más barato y quizás menos conocido e utilizado, con el que se pueden hacer muchos platos deliciosos. La calidad de su carne quizás es inferior a la del calamar, pero si lo cocinamos bien, puede quedar sabrosísima!

En Canarias se utilizan mucho las potas, sobretodo preparadas en salsa. Recuerdo hasta no hace mucho ( aún hoy en día, de vez en cuando), que los pescadores venían por las calles con sus furgonetas gritando..."poooota , pootaa fresca!! a la rica poootaaa!", y todos bajaban a comprar la potas que habían pescado la noche anterior, pues esa en una de sus característica, se pesca de noche y en alta mar.




Las potas, aceptan las mismas y variadas preparaciones de los calamares, así que para los niños ( y no sólo! )es ideal , al no tener espinas. Nutricionalmente también es muy interesante, pues es una alta fuente de proteínas y las grasas que nos aporta es saludable, a pesar de que aporta unos 190 mg. de colesterol por cada 100 g. de potas, no hace que el colesterol aumente en nuestra sangre tanto como otros alimentos, de hecho ayuda a regular los niveles de éste, gracias al tipo de grasas que contiene. Es rico en vitaminas y en minerales como el fósforo, potasio y magnesio. Así que a comer potas! 

Esta preparación es muy versátil, podemos preparar de más, y lo que nos sobre utilizarlo en muchas otras preparaciones!, aprovechad! ahorramos tiempo y dinero. Además es un plato con ingredientes muy sencillos y baratos. Menos es más! 


Ingredientes:
  • 1 kg y 1/2 aprox. de Potas.
  • 1 pimiento rojo
  • 1 cebolla grande
  • 3 dientes de ajo
  • 3 ó 4 tomates de salsa
  • 1 cucharilla de pimentón dulce
  • 2 hojas de laurel
  • 2 vasos de vino blanco ( aproximadamente)
  • 5 ó 6 cucharas soperas de aceite de oliva
  • Sal ( al gusto)
Preparación:

1- Limpiamos las potas y las troceamos al gusto. Yo no le quito la piel al limpiarlas, pues le da un toque a la salsa, pero eso es cuestión de gustos.




2- En un caldero al fuego, ponemos el aceite, y la cebolla troceada, para hacer un sofrito. Cuando empiece a estar algo pochada, añadimos el ajo troceado, el pimiento picado, y seguimos pochando. Por último cuando el sofrito esté a medio hacer, añadimos los tomates troceados y previamente pelados.



3- Cuando nuestro sofrito esté prácticamente hecho ( no es necesario que llegue a hacerse salsa aún), añadimos las potas, las rehogamos un poco, añadimos el pimentón, el laurel y por último el vino blanco. Yo he dicho una cantidad de vino aproximada, pues durante la cocción, quizás necesitemos echar un poco más. 




Dejamos guisar nuestras potas con el caldero tapado, aproximadamente 50 minutos 
( cuando vemos que las potas están blandas, para ello mejor probar la parte de los rejos, que siempre son más duros, si estos están blandos, estaremos seguros que lo demás estará perfecto!). Si vemos que aún no están suficientemente blandas, pero la salsa se ha consumido mucho, secándose o se nos está pegando, añadiremos más vino, pero nunca agua!, así quedará mucho más gustoso. En este punto probaremos de sal, la cual aún no hemos añadido, pues este tipo moluscos suelen " soltar" sal, y así no nos arriesgamos de que se nos estropee el guiso quedando salado. Si creemos que hace falta, al gusto echaremos un poco de sal marina, removemos, y continuamos guisando, ...chup chup chup!




4- Cuando creamos que ya las potas están hechas, las dejamos unos minutos más, para que la salsa se " agarre" un poco al fondo, lo que le dará un toque tostado muy sabroso, pero tened cuidado de que no se os quemen!

Lo clásico es acompañar este plato con papas arrugadas, guisadas o puré.




Es un guiso delicioso, pero además, es muy versátil, pues podemos usarlo para hacer arroz con potas, que con el sabor de la salsa, es espectacular!, o también podemos usarlas para rellenar empanadas, etc. Además sobra decir que podemos congelarlas y tenerlas listas cuando necesitemos!

Por ejemplo, os propongo, si os han sobrado potas en salsa, al día siguiente podéis hacer el arroz  ( a menudo hago las potas en salsa a posta para el arroz directamente, ñam ñam! )

Para ello solamente tenéis que añadir al mismo caldero donde tenemos las potas sobrantes, la cantidad de arroz que deseemos dependiendo de los comensales  y agua ( por cada medida de arroz, pondremos 2 medidas y media de agua, pero depende de la salsa que nos haya quedado, sí tiene mucha salsa, reduciremos la cantidad de agua). Añadimos también una pizca de cúrcuma, para dar el color amarillo característico, así nos evitamos de usar colorantes alimenticios, y además nos beneficiamos, pues la cúrcuma tiene muchas propiedades!. Añadimos la sal al gusto, cocinamos y cuando el arroz esté en su punto...voilà!, ya tenemos un delicioso plato de arroz super gustoso!



Por supuesto al arroz podemos añadirle aceitunas, guisantes, o lo que queramos, pero el caso es hacer algo sencillo, con pocos ingredientes y chuparse los dedos!.

Qué aprovechen! 

AnGie


viernes, 30 de mayo de 2014

Puchero Canario ( Felíz Día de Canarias)


Feliz Día de Canarias!






Hoy os traemos una receta de la gastronomía tradicional canaria: el puchero

Podemos decir que el puchero canario es la versión del cocido que se hace en las islas. Es un plato bastante completo y contundente, que se suele comer en el frío del invierno ( sí vale, no es que Canarias tenga un invierno gélido precisamente, peeero tenemos microclimas, y eso básicamente significa en cada esquina hace un tiempo diferente, os sorprendería jeje), haciendo un buen caldero para compartirlo con la familias, y por supuesto siempre acompañado de un buen mojo y un escaldón de gofio ( del que hablaremos en otra ocasión) vamos, todo típico típico.

Se trata de un plato donde se combinan diferentes tipos de carne ( cerdo o costillas, ternera, pollo o gallina), distintas verduras y hortalizas ( calabacín o bubango, chayotas, calabaza, zanahorias, col, habichuelas, etc), garbanzos, papas, batatas y piñas de millo ( mazorcas de maíz). En algunos pueblos le añaden una pera a este guiso. Huelga decir que podéis prescindir de los ingredientes que no os gusten o que no tengáis por casa en ese momento. De pequeña era una receta que no me gustaba nada, ya saben los niños y las verduras, pero lo que sí me encantaba y esperaba siempre cuando se hacía puchero en mí familia, era la sopa! ese caldito riquísimo que sale de cocinar todos estos ingredientes juntos es muy muy sabrosa. 

Las cantidades de un puchero, depende mucho de los comensales, se suele medir pensando en un " trocito" de cada cosa por persona, tanto de carnes, como de verduras y dependiendo de los gustos de cada uno. En este caso, hemos hecho un puchero para unas 3 ó 4 personas.


Ingredientes:

  • 1/2 kg. de carne de ternera
  • 1/2 kg. de pollo
  • 200 g. de costillas de cerdo
  • 1/2 morcilla
  • 1/2 chorizo
  • 150 g. garbanzos
  • 2 ó 3 zanahorias
  • 1 cebolla mediana
  • 1/4 pimiento rojo
  • 300 g. aprox. de habichuelas
  • Media col verde ( partida en cuartos)
  • 300 g. de calabaza
  • 8 papas ( unas dos papas por persona)
  • 2 piñas de millo ( mazorcas de maíz)
  • 2 ó 3 dientes de ajo
  • azafrán
  • perejil
  • comino 
  • pimentón dulce
  • Sal marina gruesa
  • 2 Cucharas soperas de aceite de oliva 
Procedimiento: 

1- En un caldero, ponemos agua a hervir e introducimos las carnes a guisar. Fuego medio. 

2- Pasado aproximadamente 20 minutos, introduciremos en el caldero los garbanzos y las zanahorias.

3- Pasados unos 15 minutos iremos introduciendo las verduras más duras, por ejemplo, las habichuelas ( las cuales suelen atarse con un hilo de cocina en raciones, un " paquetito" para cada comensal), la col, etc. Y paulatinamente iremos añadiendo el resto de las verduras.

4- En casa solemos hacer un sofrito, con el aceite, la cebolla picadita y el pimiento, acompañado de un majado (en un mortero ) de ajo, comino, perejil, sal y azafrán. Al final del sofrito, cuando este esté hecho, añadimos el pimentón para que no se queme y evitar que de mal sabor. Una vez hecho nuestro sofrito lo añadiremos al caldero, junto con las verduras. Esto lo dará a nuestro puchero más sabor. Pero si queremos, podemos prescindir de este paso y añadirlo todo " en crudo".

5-Cuando la verdura esté a medio cocinar, añadiremos las papas y la batata, con el fin de que no se rompan. En este punto añadiremos también la morcilla y el chorizo.

6- Cuando esté todo tierno, apagamos el fuego y a comer!

7- Si lo deseamos, podemos sacar el caldo donde se ha cocinado nuestro puchero, y hacer con éste una sopa deliciosa con todo el sabor de las verduras. Para ellos pasamos el caldo a otro caldero, le añadimos los fideos de sopa, y listo!. Además con dicho caldo podemos hacer un "escaldón de gofio", que no puede faltar en ninguna mesa canaria! ( hablaremos en otra ocasión del gofio, ese nutritivo alimento canario).

8- Para servir el puchero, en un plato, vamos poniendo un pedazo de cada cosa por persona, por supuesto según los gustos, y para finalizar aliñaremos nuestro plato con aceite de oliva y vinagre. Y a sentarse a la mesa! acompañado todo de un buen vasito de vino tinto del país. 

Que aprovechen!


Plato de puchero, escaldón de gofio, y mojo rojo


Si nos sobra puchero, podemos aprovechar para hacer unas riquísimas croquetas. Además este puede ser un plato acto para todas las dietas, eliminando las carnes en el caso de los vegetarianos o veganos, y totalmente apto para celíacos.

Saludos!

AnGie